La intención, en Tai Chi, como en el tango, es un pensamiento creativo: es proyectar el pensamiento en el cuerpo, con tal objetivo o intención.
Esta última precede al gesto o al movimiento.
La intención debe ser siempre ligera y fluida, precisa en su objetivo, y distinguirse claramente de la voluntad.
La intención debe circular libremente por el cuerpo sin crispación.
Busca la continuidad del movimiento, sabe «permanecer inmóvil en la movilidad y mantener el movimiento en el stop»
Método de registro